Uno de los principales desafíos en proyectos de reforma reside en revitalizar los espacios, tal como se plantea en el caso de la Casa DR107. Esta residencia se encuentra ubicada en la planta baja de una finca protegida en el pintoresco barrio tradicional de El Cabañal en Valencia. La distribución del espacio ha sido cuidadosamente diseñada para crear una secuencia que juega con la sensación de apertura y encierro a medida que avanzamos hacia el patio. Un ingenioso sistema de escaleras nos permite descender suavemente, conduciéndonos al amplio espacio del salón comedor, que se convierte en el corazón palpitante de la casa. Este espacio no solo gana en altura, sino que también alberga un entrepiso que añade una dimensión adicional a la vivienda. La experiencia de este entorno es casi sagrada, invitando a los visitantes a explorar y quedarse maravillados por su belleza y funcionalidad.